Un funcionario del popular servicio de chat WhatsApp de Meta dijo que la compañía israelí de software espía Paragon Solutions había atacado a decenas de sus usuarios, incluidos periodistas y miembros de la sociedad civil.
El funcionario dijo este viernes que WhatsApp había enviado a Paragon una carta de cese y desistimiento tras el ataque. En un comunicado, WhatsApp dijo que la compañía “seguirá protegiendo la capacidad de las personas para comunicarse de forma privada”.
El funcionario de WhatsApp dijo que había detectado un intento de piratear a aproximadamente 90 usuarios de su plataforma.
El funcionario se negó a decir quién, específicamente, fue el objetivo o dónde estaban geográficamente, diciendo sólo que los objetivos incluían un número no especificado de personas de la sociedad civil y los medios de comunicación. Dijo que WhatsApp había interrumpido desde entonces el intento de pirateo y estaba remitiendo los objetivos al grupo canadiense de vigilancia de Internet Citizen Lab.
El funcionario se negó a discutir cómo determinó que Paragon era responsable del ataque. Dijo que las fuerzas de seguridad y los socios de la industria habían sido informados, pero se negó a entrar en detalles.
John Scott-Railton, investigador de Citizen Lab, dijo que el descubrimiento del software espía Paragon dirigido a los usuarios de WhatsApp “es un recordatorio de que el software espía mercenario sigue proliferando y, a medida que lo hace, seguimos viendo patrones familiares de uso problemático”.
Paragon asegura que vende su información solo a países democráticos
Los comerciantes de software espía como Paragon venden software de vigilancia de alta gama a clientes gubernamentales y suelen promocionar sus servicios como fundamentales para combatir el crimen y proteger la seguridad nacional.
Pero se descubrieron repetidamente herramientas de espionaje de este tipo en los teléfonos de periodistas, activistas, políticos de la oposición y al menos 50 funcionarios estadounidenses, lo que aumenta las preocupaciones sobre la proliferación descontrolada de la tecnología.
Paragon, que según se informa fue adquirida por el grupo de inversión con sede en Florida AE Industrial Partners el mes pasado, ha tratado de posicionarse públicamente como uno de los actores más responsables de la industria.
El sitio web de la empresa anuncia “herramientas, equipos y conocimientos basados en la ética para interrumpir las amenazas intratables”, y los informes de los medios que citan a personas familiarizadas con la empresa dicen que Paragon solo vende a gobiernos de países democráticos estables.
Natalia Krapiva, asesora legal senior en tecnología del grupo de defensa Access Now, dijo que Paragon tenía la reputación de ser una mejor empresa de software espía, “pero las recientes revelaciones de WhatsApp sugieren lo contrario”.
“No se trata sólo de una cuestión de algunas manzanas podridas: este tipo de abusos (son) una característica de la industria del software espía comercial”.
