Mastercard planea un cambio radical en sus tarjetas de crédito y débito. Antes de 2030, eliminará los números visibles del plástico como parte de una estrategia para reforzar la seguridad y reducir el fraude en compras físicas y digitales.
En lugar de los tradicionales 16 dígitos, las tarjetas funcionarán con tecnologías como la tokenización y la autenticación biométrica. Estas herramientas generarán códigos únicos para cada transacción y requerirán identificación mediante huella dactilar o reconocimiento facial.
Si bien la implementación será progresiva, ya se están realizando pruebas con bancos como AMP Bank. La medida promete pagos más seguros, aunque también podría presentar desafíos para quienes no usan tecnología avanzada.
¿Cómo funcionará el nuevo sistema de Mastercard sin números en las tarjetas?
La eliminación de los números en las tarjetas de Mastercard se basa en dos tecnologías principales:
Tokenización: reemplaza los números por un código dinámico y aleatorio («token») que se genera en cada compra. Este código no se repite ni puede ser reutilizado.
Autenticación biométrica: permite validar operaciones con datos únicos de la persona usuaria, como huella dactilar o reconocimiento facial.
Ambas herramientas combinadas hacen que la información de la tarjeta quede protegida y sea más difícil de interceptar o clonar.
¿Qué impacto tendrá este cambio en los clientes de Mastercard?
El principal beneficio será una mayor seguridad en los pagos. Al eliminar los números visibles y exigir verificación biométrica, las operaciones fraudulentas se reducirán considerablemente.
Además, las empresas dejarán de almacenar los datos de las tarjetas, disminuyendo el riesgo de filtraciones como las sufridas por compañías globales en los últimos años.
Sin embargo, la implementación será gradual. Se espera que la adopción completa tarde varios años, y aún quedan desafíos por resolver, especialmente para personas mayores o sin acceso a dispositivos móviles.
A pesar de estos obstáculos, la tendencia es clara: las tarjetas tradicionales están en camino a desaparecer, dando paso a una nueva era de pagos digitales más seguros.