El conglomerado danés AP Moller-Maersk, dueño de Maersk Line, uno de los principales operadores de transporte marítimo de mercancías, logró un beneficio neto atribuido de US$6,776 millones (€6,439 millones) en el primer trimestre, lo que representa un incremento del 151% en relación al mismo periodo del año pasado, gracias al aumento de las tarifas de transporte de mercancías.
“En el primer trimestre, registramos el mejor trimestre de ganancias en A.P. Moller – Maersk”, celebró Soren Skou, consejero delegado de la multinacional, quien atribuyó este aumento al efecto de la subida de las tarifas de flete y a la firma de contratos a niveles más altos.
La facturación del mayor grupo industrial de Dinamarca entre enero y marzo alcanzó los US$19,292 millones (€18,332 millones), un 55% por encima de los ingresos registrados en el primer trimestre del ejercicio precedente.
Los ingresos de la división de transporte marítimo de mercancías aumentaron un 64.3%, hasta US$15,570 millones (€14,795 millones), mientras que el negocio de logística elevó un 40.8% su facturación, hasta US$2,879 millones (€2,735 millones), y la división de terminales elevó un 23.6% sus ingresos, hasta US$1,131 millones (€1,075 millones).
En el primer trimestre, Maersk registró un impacto negativo de US$718 millones (€682 millones) en su resultado bruto de explotación subyacente como consecuencia de la decisión de salir del mercado ruso.
De cara al conjunto del ejercicio 2022, la danesa espera que los ingresos del negocio de transporte marítimo sigan siendo sólidos, ya que el aumento de las tarifas de flete en la cartera de contratos a largo plazo agregará aproximadamente US$10,000 millones (€9,502 millones) a los ingresos en comparación con 2021.
Esto compensará con creces el aumento significativo de los costes, que subieron un 21% en el primer trimestre debido al encarecimiento del combustible y la presión inflacionaria en los costes de manejo de contenedores y redes.