Las ganancias del fabricante de chips estadounidense Nvidia y líder del sector crecieron 168% anual a 16,599 millones de dólares (mdd) en el segundo trimestre fiscal terminado el 28 de julio.
Además, los ingresos de la firma aumentaron 122% a 30,040 mdd, superando las estimaciones de 28,700 mdd.
Las ventas en el segmento de centros de datos crecieron 154% anual a 26,300 mdd, por encima de las estimaciones de 25,150 mdd.
Además, Nvidia pronosticó ingresos para el tercer trimestre en línea con las estimaciones de Wall Street, que, sin embargo, no lograron impresionar a los inversores que han impulsado un vertiginoso repunte de sus acciones al apostar miles de millones a la inteligencia artificial generativa.
La compañía previó ingresos por 32,500 mdd, más o menos un 2%, frente a la estimación promedio de analistas de 31,770 mdd, según datos de LSEG.
Nvidia sigue en la cresta de la ola de la inteligencia artificial, y prueba de ello es el crecimiento exponencial de sus centros de datos, que han sustituido a los videojuegos como motor del negocio debido a la demanda de chips de alta capacidad, sobre todo por parte de grandes tecnológicas y empresas de internet.
Según un documento suplementario a los resultados financieros publicados este miércoles, Nvidia espera aumentar la producción del chip gráfico de alta gama específico para la inteligencia artificial Blackwell a partir de diciembre y obtener “varios miles de millones de dólares en ingresos” derivados de este producto este mismo año, saliendo al paso a la preocupación por los retrasos de producción que obstaculizan el crecimiento. “La IA generativa va a revolucionar cada sector”, dijo afirmó el CEO Jensen Huang en un comunicado, y apuntó a la alta demanda del chip Hopper y a la “anticipación” por el Blackwell, del que está enviando “muestras” a socios y clientes. La firma dijo que ha cambiado la “máscara” de Blackwell -una parte del diseño y fabricación del chip- para mejorar sus rendimientos, lo que puede suponer un aumento de costos y puede explicar su retraso en el envío a clientes en grandes volúmenes, según analistas.
Mientras el chip Hopper, especializado en el entrenamiento de modelos de lenguaje, sistemas de recomendación y aplicaciones de IA generativa mantiene una “fuerte demanda y se espera que los envíos se incrementen” en los próximos meses.
Nvidia previó un margen bruto ajustado del 75%, más o menos 50 puntos base, para el tercer trimestre. Según datos de LSEG, la media de analistas espera un margen bruto del 75.5%. En el segundo trimestre, el margen bruto fue del 75.7%, frente a una estimación media del 75.8%.
Las acciones de la tecnológica con sede en Santa Clara, California, cayeron 3% en las operaciones posteriores al cierre de la sesión, lo que redujo las pérdidas anteriores. Los títulos, que cerraron la sesión regular con una caída del 2%, han subido más del 150% en lo que va del año.
Los inversores tenían grandes expectativas respecto del fabricante de chips, luego de un aumento de más de siete veces en las acciones de Nvidia en los últimos dos años, lo que lo convirtió en uno de los mayores beneficiarios de un repunte en las acciones vinculadas a la inteligencia artificial.
La capacidad de la compañía para superar las estimaciones enfrenta desafíos cada vez mayores, pues cada éxito impulsa a Wall Street a elevar aún más sus objetivos.