El Fondo Monetario Internacional (FMI) reiteró este jueves la necesidad urgente de que el Congreso estadounidense eleve el techo de deuda ya que, de no hacerlo, habrá «graves repercusiones» tanto para la economía estadounidense como a nivel global.
«Nuestra evaluación es que tendrá repercusiones muy serias no solo para los EE. UU. sino también para la economía global en el caso de que haya un incumplimiento de la deuda y alentamos encarecidamente a las partes a unirse para llegar a un consenso para abordar este asunto con urgencia», declaró en una rueda de prensa la portavoz del FMI, Julie Kozack.
Esta posible repercusión internacional del incumplimiento de los pagos de Estados Unidos se da en un contexto «muy difÍcil para la economía mundial», explicó la portavoz de la institución.
Las consecuencias de no elevar el techo de deuda «podrían incluir mayores costos de endeudamiento«, en un momento en el que la Reserva Federal (Fed) ha llevado a cabo una serie de subidas en los tipos de interés y la tasa está en el 5 % y el 5.25 %, la más alta desde 2007.
Lo que ha pasado
El pasado martes el presidente estadounidense, Joe Biden, se reunió con el líder de la mayoría republicana en la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, para hablar de la necesidad de suspender el techo de deuda y evitar así que Estados Unidos entre en una suspensión de pagos.
Ambos no llegaron a un acuerdo y se limitaron a reiterar cara a cara sus posiciones sobre la suspensión del techo de deuda, cuyo límite de 31.4 billones de dólares ya se alcanzó el 19 de enero, por lo que actualmente el Gobierno está recurriendo a dinero en sus reservas para pagar las deudas que ha contraído.
El Departamento del Tesoro estima que esas reservas se agotarán el 1 de junio, momento en que EE.UU. entraría automáticamente en una suspensión de pagos, la primera de su historia.
McCarthy quiere vincular la suspensión del techo de deuda con importantes recortes de gasto en algunos de los programas estrella de Biden, como la cancelación de la deuda estudiantil, y además quiere endurecer los requisitos que deben cumplir los estadounidenses más pobres para acceder a ayuda sanitaria y alimentaria.
Por su parte, Biden lleva semanas diciendo que no está dispuesto a negociar sobre el techo de endeudamiento y que los republicanos tienen la obligación de asegurarse de que Estados Unidos puede pagar las deudas ya contraídas, como hicieron en varias ocasiones con su antecesor, Donald Trump (2017-2021).
Biden volverá a reunirse con McCarthy y el resto de los líderes del Congreso el viernes.