(Bloomberg) —Catar desembolsó cientos de miles de millones de dólares para preparar al país para la Copa Mundial de la FIFA 2022, y los primeros datos sugieren que los fanáticos también gastaron mucho.
Los aficionados gastaron un 39% más en los estadios que en el Copa Mundial de la FIFA de Rusia 2018, según datos de Visa, el proveedor oficial de pagos del evento. Los datos incluyen el gasto con tarjetas Visa, las únicas aceptadas en los estadios.
Los visitantes de Arabia Saudí, Estados Unidos, Emiratos Árabes Unidos, México y Reino Unido fueron los que más dinero gastaron, según Visa. En la final entre Argentina y Francia, el 18 de diciembre, se registró el mayor gasto de todos los partidos.
Los organizadores del torneo en Catar esperaban que la Copa Mundial de la FIFA proporcionara un impulso de US$17.000 millones a US$220.000 millones a la economía y sirviera de trampolín para un mayor desarrollo de sectores como el turismo y el entretenimiento. Sin embargo, Reuters informó que a mitad del evento, el número total de visitantes internacionales probablemente no alcanzaría las proyecciones de 1,2 millones durante el torneo de un mes.
El evento ya demostró ser un éxito financiero para el organismo rector del fútbol, la FIFA, que dijo que generó US$7.500 millones en este ciclo de cuatro años. Eso es US$1.000 millones más de lo previsto.